
Todos los seres compartimos una experiencia de sentir plenitud y satisfaccion, no teniamos que buscar nada afuera , no existia la sensacion de falta: la vida en el útero materno. ..
Al nacer , las caricias , el ser cargado enbrazos , el amamantamiento, el calor brindan vivencias de seguridad
Si bien no es igual , es el paso a sentir sensaciones parecidas , alimentando asi , el cuerpo, la mente, y el espíritu del pequeño ser humano.
Al crecer , nos alejamos del cuerpo de mamá , y perdemos esa sensación de plenitud, y al sentir esa falta, sentimos una angustia, la cual va sanandose al acomodarse a los ritmos , y cambios , y al darnos cuenta que no somos lo mismo, surgen la necesidad de adaptacion, y la necesidad de segurdad y confianza en la supervivencia
Entendemos que hay una falta, y debe ser solucionada . y asi buscamos la aceptacion , en nuestros actos para sentirnos seguros, satisfacer al otro, es una necesidad
Avanzando en la vida , solo buscando la satisfaccion en el otro, en lo externo, , el contacto con nuestra esencia ,empieza a adormecerse, como si quedara en un lugar que no frecuentamos.
Creamos mascaras para interactuar , en diferentes ámbitos , y con diferentes actores, en cada etapa de nustro crecimiento y estas mascaras se amoldande al modo que terminamos siendo ellas. Alejandonos de nuestra esencia, el cuerpo ya no esta relajado y asume el rol de Portavoz, con herramientas como la tensión, , el malestar , la disfunción.
Asumimos que es normal sentirnos mal, nos resignamos desoyendonos.
PERO EL CUERPO NOS LLAMA, UNA Y OTRA VEZ ..SIEMPRE ESTA ENVIANDO SEÑALES QUE NO ESTAMOS ACOSTUMBRADOS A OIR